La confianza

Es fundamental que dentro del aula se den situaciones saludables de relaciones personales, con esto estamos favoreciendo el desarrollo de la competencia social y creando el clima más favorable y motivador para situaciones de aprendizaje, pude observar que el hecho de que los niños sientan confianza aumenta su nivel de participación  en las actividades lo que permite conseguir mejores resultados en las situaciones de aprendizaje, sin embargo pienso que debemos encontrar un equilibrio y hacer que ellos noten que pueden expresarse con confianza frente a nosotros pero que también somos una autoridad y deben respetar las reglas que se establecen.

Totalmente de acuerdo contigo, Diana, el gran reto de encontrar un equilibrio. Los niños necesitan sentir la autoridad de la maestra y aprender a respetarla para poder organizar actividades y trabajar pero también tienen que sentirse amados, mimados, comprendidos, queridos para aprender. Nuevamente, quizá los adultos podemos ser más autododáctas y cuando no tenemos confianza en el profesor buscamos otras formas de aprender pero los niños preescolares necesitan antes que nada esto que tú comentas, un clima de confianza para interacturar si esto no se da todo lo demás es difícil.

El aula de clase es algo más que un espacio de intercambios cognitivos, es un espacio de construcción de actitudes y vivencias subjetivas gestadas tanto por los estudiantes como por los docentes y mediados por el afecto como componente fun- damental del conocer, actuar y relacionarse.
Reconocer el afecto como una emoción fundamental en los actos de conocer, pensar, actuar y relacionar- se se constituye en una aproximación al proceso de formación integral uni- versitaria.

Los individuos estan formados por las esferas de la personalidad que consisten en la esfera de la psicomotricidad, cognitiva y emotiva.
Es muy cierto que con los pequeños tenemos que trabajar con las tres pero ¿a quien no le gusta que los temas que se están viendo se relacionen con aspectos relacionados con nuestra vida? o como ahora todos decimos "a los maestros les falta que hagan mas activa la clase". Cuando somos adultos, y bien lo menciona la maestra, podemos lidiar con estos confilctos, ya sea que realicemos investigaciones externas a lo que el maestro intento explicarnos. Pero un pequeño de preescolar no o va a hacer a menos que se los pidamos. Todo lo que le presentamos es una experiencia significativa para ellos.

Entonces porque no darles esa apertura en la que pueden sentir que cuentan con nosotros. Un maestro nos comentó que en sus años de trabajo, lo que mas se le hacia efectivo era tocar esa esfera emotiva, y de ahi todo fluia. Creo que es un buen tip y mas para nosotras que trabajamos con pequeños que apenas se estan acostumbrando a separarse del seno materno.

Considero importante el punto que toca mi compañera Diana, es importantísimo no solo lo cognitivo ni lo psicomotriz del niño, sino también la rama emotiva, que en muchas ocasiones es la que dejamos hasta al ultimo porque nos interesa cumplir con las dos primeras... porque las vemos más importantes.

Debemos abarcar todas estás partes, puesto que estas tres son, los tres aspectos más importantes de un niño preescolar.

En cuanto a la opinión de Adaly, comparto la idea de que es algo muy difícil de tener un equilibrio, pero si es importante que los niños reconozcan y sepan que en un lugar hay reglas, un líder y acciones que hay que cumplir, para tener una atmosfera de buena convivencia.

Darles libertad de expresión, pero no el libertinaje de hacer lo que ellos quieran.

Los niños construyen relaciones principalmente a través del juego y que mejor manera para ganar su confianza. Esta estrategia me permitió en pocos días acercarme mas al grupo ya que desde la etapa de observación aunque solo fue un día participe en los juegos y actividades que planto la maestra y al tener la semana de de practica muchos de los alumnos lo recordaron. Otra cosa que también creo ayuda es el acercarse a cada niño y ponerle la atención individual que requiera alabando y motivando su trabajo. Estoy de acuerdo con Ale de darles libertad siempre y cuando se respeten los roles de cada quien.

La confianza es primordial empezando en creer en nuestra planeación, para poder tener confianza en lo que vamos a trabajar con el grupo, los niños son muy listos y se dan cuenta perfectamente de cuando nos sentimos inseguras, mantener un canal de confianza alumnos -docente , alumno-alumnos para crear un ambiente de aprendizaje

Concuerdo contigo Adaly, y lo comentaba en otro post; en mi jardín los niños estaban acostumbrados a ser siempre regañados y es difícil de repente llegar y querer construirles un ambiente de confianza en tres días y no porque no se pueda, si no porque es algo nuevo para los niños. Ahora bien, concuerdo también con que necesitamos equilibrio, y es precisamente esta perdida de equilibrio lo que nos lleva a volvernos maestras regañonas que no permiten hacer nada a los niños o maestras apapachadoras que no ponen límites, sé por experiencia que lograr este equilibrio no es fácil, pero como siempre lo he mencionado, tener una buena comunicación con los niños, dejar bien claros los roles y las reglas que debe seguir cada quien es primordial para que este equilibrio pueda irse logrando.